Abandona la plaza por la estrechísima calle Mariscal hasta que encuentres tres cruces ubicadas en lo alto de tres columnas de mármol blanco.
Estas cruces constituyen un calvario, lugar donde Jesús fue crucificado junto a los dos ladrones.
El pedestal sobre el que se levantan estas cruces está hecho a base de un material constructivo muy común en la arquitectura tradicional sevillana. ¿De qué material se trata?