█ Conventual de San Benito











Sigue la larga calle hasta llegar a una bifurcación, toma el camino de la derecha que hasta el Conventual te llevará del tirón. En este majestuoso lugar moraron los
Caballeros de la Orden Militar de Alcántara, mitad religiosos, mitad guerreros, que adoptaron la regla del Cister.
En 1218 surge la Orden Militar de Alcántara, cuyo emblema será una cruz verde flordelisada. Los caballeros ocuparón la antigua Alcazaba árabe durante al menos 300 años, hasta que los Reyes Católicos autorizan la construcción del nuevo Conventual. En época de Felipe II por motivos económicos principalmente, el edificio quedaría inconcluso.
Lo primero que vas a contemplar es
la Hospedería, conocida como la
Galería de Carlos V, que nos recuerda los palacios venecianos. Flanqueada por dos torres con los escudos de Carlos V y Felipe II es un magnífico ejemplo del renacimiento español.
En 1986, en la antigua huerta del convento, se construyó un auditorio que sirve como marco al
Festival de Teatro Clásico de Alcántara que desde 1984 sigue deleintándonos con lo mejor del Teatro del Siglo de Oro.
La principal estancia del interior es
El Claustro gótico donde se abren dependencias y enterramientos. Entre estas dependencias destacan
La Capilla del Comendador de Villasayas, o
Sala Capitular, presenta una sacristía donde se exponen los planos originales de la última restauración del Puente Romano.
El Refectorio o el comedor de los freires.
El Patio Azteca, donde se ubicaron las antiguas celdas de los frailes. El
Enterramiento de Marcelo de Nebrija y
La Iglesia a modo de catedral inconclusa, con trazas renacentistas y platerescas. Consta de tres naves con bóvedas de crucería nervada. Escudos de Carlos V presiden la nave central, las laterales se corresponden con las capillas de los Comendadores Diego de Santillán y
Nicolás de Ovando, primer gobernador de la Indias, donde permanece enterrado En el lado de la epístola se abre la Capilla del Comendador de Piedrabuena, Frey Antonio Bravo de Jerez y, en el lado del evangelio, la sacristía con su original
escalera de caracol.
Este covento fue declarado Monumento Nacional en 1914.
Durante la
Guerra de la Independencia este monumento fue tomado como cuartel por
Napoleón, usurpando el famoso recetario de cocina de los monjes alcántarinos.
Si en el Convento te quieres introducir, la calle empedrada debes seguir. Al fondo, a tu derecha, una
puerta singular acoge una
escultura frutal. Esta fruta solo puedes ver, pero no puedes comer
¿Sabes qué fruta es?