En un simple vistazo a esta estancia apreciarás diferencias respecto a la decoración del dormitorio femenino. La del varón es mucho más seria y, aunque sigue siendo elegante, el mobiliario es más práctico.
Las paredes están decoradas con retratos masculinos que representan diversos estereotipos de la época. En esta sala verás, además, un tocador masculino y un orinal, una mesita de noche para depositar el vaso de agua, una estufa y diversos objetos decorativos.
Un elemento llamativo de esta habitación es el espejo. La moda del espejo de cuerpo entero se introduce durante el reinado de Fernando VII. En concreto, el modelo que tienes ante ti, de pie y basculante, recibe su nombre de una palabra griega que significa “alma”. ¿Cómo se llama esta tipología de espejo?