Has acabado tu aventura entre dinosaurios y otras bestias del pasado remoto, pero seguro que ya estás a salvo… ¡Enhorabuena!, eres un auténtico explorador de mundos perdidos.
Para recuperarte de las intensas emociones vividas te recomendamos que conozcas la magnífica gastronomía serrana en los restaurantes de Salas. Luego anímate a descubrir más rincones de esta pequeña ciudad: el eremitorio de Peña Rota; las iglesias parroquiales de Santa María y Santa Cecilia y los tranquilos barrios donde se encuentran; el Palacio de Cultura, ligado a la leyenda de los Siete Infantes de Lara; acércate también al torreón de Castrovido para disfrutar del paisaje del valle del Arlanza. Y por supuesto, a la Ruta Tierra de Dinosaurios para conocer in situ los increíbles yacimientos de dinosaurios de la Sierra de la Demanda.
Recuerda que te esperamos de nuevo, pues ¡Salas deja huella!