█ Montaña del Príncipe Pío













La calle está cortada por escombros y por una barricada humeante, así que has de volver la Plaza del 2 de Mayo. La mano de la estatua de Velarde apunta hacia el oeste, hacia la
calle Daoiz, parece indicarte el camino a seguir. Te esperan 20 minutos de huida. Avanza por la calle Daoiz hasta el final, y luego gira a la izquierda (calle de San Bernardo). Prosigue tu escapada y gira a la derecha por la tercera calle que encuentres, la calle del Noviciado, que tras atravesar la calle de Amaniel pasa a llamarse calle travesía Conde Duque. Una vez en esta travesía avanza un poco y gira a la izquierda por la calle Juan de Dios. Camina hacia adelante, empalma con la calle San Leonardo y llegarás al final de la Plaza de España. Baja por la derecha de la plaza hasta llegar a la calle Ferraz, donde has de girar a la derecha y buscar un antiguo templo egipcio llamado
Templo de Debod. Precisamente Napoleón está expoliando templos y tesoros como este en todo Egipto.
Te encuentras en lo que los madrileños llaman la
montaña de Príncipe Pío, un lugar con arbustos y maleza por lo que decides esconderte y descansar un poco.
Súbitamente te despiertas, te has quedado dormido, es más de media noche, ya es
Tres de Mayo. Puedes ver con todo lujo de detalles como un pelotón francés está
fusilando a los infelices que han sido apresados tras la revuelta. Es mejor permanecer escondido hasta que los franceses desaparezcan.
En tu espera indica
cuantas columnas custodian la entrada del templo de Debod.