Desde la entrada principal te adentras a la sala de la colección permanente del museo. Tendrás que seguir en sentido contrario a las agujas de un reloj y ahí encontrarás la primera obra.
Nuestro recorrido se inicia con la obra del artista argentino Julio Le Parc, una abstracción en la que catorce colores y el movimiento en forma ondulante dominan el lienzo. Utilizando el aerógrafo o pintura a pistola, Le Parc consigue una degradación del oscuro al claro y un manejo bastante preciso de la superficie de la obra, generando un efecto óptico en el espectador.
Esta obra puede sugerir “el fuego”, “plantas” pero también quizá un reptil. ¿Qué animales parecen recordar también estas líneas ondulantes ascendentes?