█ Plaza Mayor - Pac-Man








A la derecha del reloj que marca las campanadas de fin de año, nace la
calle Mayor. Avanza un poco por ella, y enseguida toma la
calle de Postas (izquierda), que enseguida pasa a llamarse
calle de la Sal, y llega hasta la
plaza Mayor.
Al igual que esta plaza se considera el origen urbano de una nueva era (el Madrid de los Austrias), el juego
Pac-Man supuso una nueva era en el primitivo mundo de los videojuegos, ya que hasta la fecha todos los juegos populares estaban basados en la violencia (guerras y disparos). Este clásico de la empresa nipona
Namco pronto alcanzó un récord de ventas sin precedentes. Su creador, Iwatani, pensó llamar al videojuego
Pakkuman, por la onomatopeya japonesa ‘paku-paku’ que simula el sonido de una persona masticando (nuestro “ñam-ñam” en castellano). De ese origen evolucionaron al término
Puck-Man, y al final el nombre se modificó a
Pac-Man.
Esta plaza y sus
237 balcones, han sido testigos de corridas de toros, ejecuciones, autos de fe, de la canonización de San Isidro,… estos hechos están grabados en las
farolas que adornan las esquinas de la plaza. Al igual que los fantasmas de Pac-Man, se cuenta que en esta plaza vaga el
fantasma Cirilo que, según cuenta la tradición castiza, fue uno de los muchos ajusticiados en esta plaza Mayor de Madrid.
Pasa de nivel indicando
en qué año apareció Pac-Man, o indica
qué animal aparece junto a Felipe III en la estatua del centro de la plaza.