Continuar en el sentido de la visita rodeando la sala, y llegar al pasillo izquierdo del museo, en dirección contraria a la que se vino. En el patio central de esta planta se encuentran los pozos.
Este edificio fue construido en 1781 por orden del rey Carlos III para albergar las herrerías de los astilleros y del arsenal. Para forjar las anclas, cadenas, y demás piezas de hierro que se fabricaban aquí era indispensable el acceso a agua dulce. Es por ello que el edificio de Herrerías se ubicó en este lugar y se equipó con dos pozos en su centro. El hecho de situar la herrería cerca del astillero también facilitaba el traslado de piezas y materiales.
En las herrerías había 64 forjas en las que llegaron a trabajar más de 300 operarios, y se mantuvieron en funcionamiento durante 69 años. Al edificio se le dio diversos usos en las décadas posteriores, y en 2008 se convierte en la sede del Museo de la Construcción Naval.
En los primeros tiempos de la navegación, las embarcaciones utilizaban remos como método de propulsión. Luego llegaría la vela; pero la Revolución Industrial trajo una máquina que revolucionó la manera de impulsar los barcos. Se trata de la máquina alternativa de _ _ _ _ _ .