█ Plaza Gregorio Bravo










¡Bienvenidos a la muy noble, leal y antigua villa de Valencia de Alcántara!
Aquí, en el centro de la plaza Gregorio Bravo, más conocida por los valencianos como
“La Playa”, comenzamos nuestro recorrido, junto a esta majestuosa fuente de mármol donada por el
Marqués de Labrador en el siglo XIX y cuyo fin fue abastecer a la población del
agua canalizada desde las afueras del pueblo. Una tarea que podría parecer sencilla, pero que queda muy lejos de la realidad en una población que se encuentra a más de 400 metros de altura.
Dirige tu mirada hacia el monumental edificio situado en esta plaza,
“El Conventual de Santa Clara”.
Fue construido en el siglo XVI en advocación a Santa Ana, por expreso deseo de Bravo de Jerez y García de Contreras. Tras superar múltiples vicisitudes, fue ocupado por Monjas de la Orden de Santa Clara, lo que hizo que fuese conocido con ese nombre. Una de las monjas que lo habitaron fue la viuda de García de Contreras, Doña Beatriz de Contreras. Esta llegó a ser Patrona del Monasterio e impuso, entre otros requisitos, la construcción de una Celda Prioral para sí con vistas a la Iglesia anexa.
Los muros de este Convento han sido testigos de las diferentes funcionalidades que ha ido tomando el edificio. Desde lugar de acogimiento para las tropas portuguesas tras la conquista de la villa en el s. XVIII hasta Escuelas Municipales en el siglo pasado. En la actualidad, alberga la
Oficina de Turismo y el
Museo Etnográfico.
Rodea el edificio por la derecha y podrás contemplar la bonita fachada de la
“Iglesia de los Padres”, templo del Convento, de claro estilo renacentista.
¿Qué llevan en sus manos los dos apóstoles (San Pedro y San Pablo) que vigilan el pórtico de la Iglesia?