█ Una dedicatoria muy especial
















Para la siguiente parada debes seguir hacia delante, mira justo en frente, verás una vitrina con mosaicos, tres ánforas y la puerta de la sala II. Entra en la sala, la pieza que buscas está en la pared frontal del fondo.
Esta pieza es una
HERMA. Un pilar de piedra sobre el que se colocaba un busto, que normalmente era el del
Dios Hermes, por lo que puede deber su nombre a esto, o a que en griego, “hérmata” significaba "bloque de piedra". Tenían diversos usos: para marcar los límites de una propiedad, indicar la distancia en un camino, para alejar los malos espíritus, o con carácter votivo, o dedicatorio, a modo de las placas conmemorativas actuales. Lo que la hace especial es el hecho de que sea
una mujer la que se la dedique a su prometido, pues en aquella época esto era algo impensable, sólo los hombres podían hacerlo. Es justamente ese rasgo lo que la hace singular, según el arqueólogo Dr. Armin U. Stylow (Instituto de Arqueología de Múnich), siendo
única en Hispania, puesto que por ahora no se ha hallado otra semejante.
Para llegar al siguiente paso necesitamos que nos digas
quién fue esa mujer que decidió romper la tradición que imperaba en ese momento.