█ Plaza de Santa Cruz










Vuelve sobre tus pasos, hasta volver a la calle Lope de Rueda y gira a tu izquierda. Avanza por esta calle que tiene forma de “L”. Cuando llegues a un cruce toma el camino de la derecha (calle Santa Teresa) y al final del mismo llegarás a la
plaza de Santa Cruz. Verás en tu camino unas ruedas de molino incrustadas en la pared, cuya misión era minimizar los desperfectos en las fachadas que ocasionaban los carruajes al rozar las paredes de estas estrechas callejuelas.
En este lugar existió una
mezquita musulmana, posteriormente los judíos levantaron una
sinagoga y más tarde los cristianos erigieron la
iglesia de Santa Cruz que da nombre a la plaza y a todo el barrio. Cabe destacar que en toda la judería existieron tres sinagogas que fueron construidas sobre tres mezquitas.
En 1811, durante las
Guerras Napoleónicas el templo de Santa Cruz fue derribado. El célebre pintor del Siglo de Oro don
Bartolomé Esteban Murillo estaba enterrado en esta iglesia, por los que sus restos estarán bajo algún lugar de esta plaza.
En el centro de la plaza podemos ver una
cruz de forja que data del año 1692. Esta plaza no era su ubicación original ya que hace siglos se encontraba en el cruce de la calle Sierpes con Rioja. Los cuatro
reptiles que custodian esta cruz son los que dieron el nombre a la popular calle
Sierpes. De qué
animales se trata.